sábado, 29 de noviembre de 2008

PAÍSES EMERGENTES

Llegamos a creer que eran el mundo nuevo -la esperanza creciente. Y se inventó hasta una sigla, BRIC, para no tener que repetir una y otra vez, por extenso, los nombres de los cuatro colosos: Brasil, Rusia, India y China.

Pero llegaron los atentados de esta semana, en Bombay, y con ellos -creo yo- la necesidad de revisar los sueños infundados. La perfección, sincronía y brutalidad de esos atentados convierten en cosa secundaria los constantes sobresaltos, con sangre o sin ella, que la India viene padeciendo desde su independencia. Ahora hay que reconocer que hay zonas del mundo donde la civilización y el progreso sencillamente están en peligro, por no decir que resultan imposibles. Si los países emergentes no emergen, la historia puede estar retrocediendo.

La profundidad de la cuestión no permite, en una nota como esta, ir más allá del pánico difuso. Pero podemos tantear los elementos esenciales:

Si en un país como la India, inmenso, democrático, con tanta vitalidad pese a sus carencias extremas, el terror no amaina sino que aumenta constantemente, es que nadie está a salvo. La dimensión geográfica, demográfica y económica no es garantía de nada, si puede ser amenazada y herida por un grupito de asesinos que matan por matar.

No estamos hablando de terrorismo, sino de emerger o no emerger. Y en ese enfoque, la China tampoco ofrece garantías de futuro. ¿Futuro sin libertad, sin democracia? ¿Un futuro con dos tercios de la población viviendo en la Edad Media y un tercio viviendo en el siglo XXII?

Rusia... En Rusia, la herencia zarista, mezclada con la comunista, mezclada con la injerencia religiosa, mezclada con un cierto complejo de inferioridad, mezclada con la histórica incapacidad democrática, se convirtió en una democracia de opereta, asentada en la corrupción y el chantaje. ¿Eso es emerger?

La excepción sería Brasil. Brasil mantiene con orgullo el milagro de su unidad territorial, cultural, económica y política, pese a sus inmensos vacíos demográficos y a sus disparatadas concentraciones urbanas. En Brasil hay una democracia real, efectiva, plena, aunque haya clamorosas desigualdades sociales. En ocho millones y medio de kilómetros cuadrados conviven en paz los hijos, nietos, bisnietos y tataranietos de todas las razas llegadas de todos los confines de la Tierra. Allí, nadie mata, ni mataría, por odio racial o para excluir al diferente. La delincuencia, que existe y no es poca, es una simple manera, aunque brutal, de buscar una mayor integración -de aproximarse al visible y atractivo bienestar. Por eso, y por sus riquezas naturales, el Brasil es imparable como potencia emergente. Su progreso, único, atípico, está emparentado con la alegría y la tolerancia -con la ausencia de amargura y de resentimiento.

viernes, 28 de noviembre de 2008

BLOGS Y PERIODISMO

Dice mi admirado Jean-François Fogel, y lo dice sin dudarlo ni matizarlo, que sí, que los blogs son periodismo. Y a mí me preocupa tanta certeza. Me preocupa, no sólo por el respeto profesional que Fogel merece, sino también por la influencia que él tiene, y que puede tener, como consejero que es de la Fundación Nuevo Periodismo Iberoamericano, de García Márquez.

Si no es periodismo -digo yo- todo lo que se publica en papel, ni todo lo que se dice por la radio, ni todo lo que se divulga por televisión, tampoco es periodismo toda la basura que en forma de blogs circula por la Red.

Para que algo sea periodismo -en el quiosco de la esquina o en la inmensidad del ciberespacio- debe obedecer a una serie de requisitos: oficio, ética, estética, calidad, responsabilidad, etc. Y para que todo eso sea posible se necesitan reglas y conceptos que en el mundo de los blogs sencillamente no existen. Reglas y conceptos periodísticos, si es de periodismo de lo que estamos hablando...

Un blog no es un periódico, todavía, ni siquiera cuando lo edita un periodista profesional. Y no lo será mientras no se sepa con exactitud lo que es Periodismo Digital, que no es lo mismo que Prensa Digital.

Se habla y se pontifica, cada vez más, sobre Prensa Digital. Pero se habla poco, o nada, de Periodismo Digital.

Se da por sentado, por mucha gente, que Prensa Digital son las versiones digitales de los periódicos de papel, o la puesta en escena de las mil ocurrencias editoriales de los informáticos. Pero ni una cosa ni la otra son Periodismo Digital. El verdadero Periodismo Digital no puede ser, por muchas razones de peso, ni la reproducción del periodismo impreso, ni la ciega subordinación a la tecnología.

La confusión se debe, seguramente, a la juventud del milagro digital. En apenas quince años de intensa innovación tecnológica se han repetido todas las incertidumbres que en más de dos siglos de historia ya había sufrido el periodismo convencional. Los informáticos de ahora son los herederos de los impresores de antes, que eran los que decidían y mandaban, hasta que la lógica puso la Redacción por encima del Taller, y la Ley de Imprenta fue felizmente sustituida por la Ley de Prensa. El vértigo ha sido tan vertiginoso, que ni siquiera hemos tenido tiempo para hacernos la pregunta del millón: ¿Por qué el periodismo televisivo, o el radiofónico, son distintos del periodismo impreso, en el fondo y en la forma, y el digital ha de ser igual, o peor?

La cuestión es apasionante, en todos los sentidos. Pero habría que parar la desenfrenada improvisación, y ponerse a deslindar, en serio, de una vez por todas, el contenido del continente. A eso me dedico desde hace muchos años, y puedo asegurar, aunque la dedicación valga la pena, que no son pocas las piedras del camino.

miércoles, 26 de noviembre de 2008

RUSOS AUTÉNTICOS

Los rusos de Rusia quieren quedarse con Repsol. Lo intentan primero con una empresa estatal. Lo intentan después con otra, Lukoil, que dicen que no es estatal, pero que es como si lo fuera. Tal vez no consigan su objetivo, pero sí han conseguido, cuando poco, reavivar la crispación política en España.

Mientras tanto, el joven, menudito y tieso Dimitri Medvédev se pasea por América Latina, visitando Perú, Brasil, Venezuela y Cuba:

En Lima se espanta oyendo al presidente Alán García hablar de Karl Marx una y otra vez, y se atreve a desairarlo: "Perdone. Pero debo decirle sinceramente que no tengo ningún busto de Marx en mi casa, y sí de Francisco de Miranda" (el general venezolano que fue amigo de la emperatriz Catalina la Grande en el siglo XVIII).

En Rio de Janeiro se hospeda en el romántico Hotel Copacabana Palace. Con Brasil, la idea es "avanzar" en la agenda bilateral: propiedad intelectual, biotecnología, exploración petrolífera, fin de los visados para los turistas de ambos países.

A Caracas llega, casualmente, con los resultados de las últimas elecciones todavía frescos (...), y coincidiendo con el atraque en el puerto de La Guaira de la flota rusa, que arriba para realizar "ejercicios conjuntos" con las fuerzas navales venezolanas, a partir de hoy, miércoles.

En Cuba, todo será como está mandado: fortalecer los lazos de amistad; seguir dando ejemplo de justicia e independencia, para que el mundo tome nota y aprenda de la experiencia revolucionaria castrista. Nada de gringos norteamericanos, que el imperialismo bueno y auténtico es el de Moscú.


martes, 25 de noviembre de 2008

LOPE DE VEGA

Tal día como hoy, 25 de noviembre, pero de 1562, nació en Madrid Félix Lope de Vega y Carpio, el gran poeta y dramaturgo del Siglo de Oro español, y, por la inmensidad de su obra, uno de los autores más prolíficos de la literatura universal.

Se le atribuyen unos 3.000 sonetos, 3 novelas, 4 novelas cortas, 9 epopeyas, 3 poemas didácticos, y, según Juan Pérez de Montalbán, 1.800 comedias.

Fue amigo de Quevedo y de Juan Ruiz de Alarcón, y enemigo de Góngora. Cervantes lo envidiaba. Vivió una vida tan intensa y extremada como su obra.

Pregunta: ¿Cuántos españoles vivos saben de verdad quién fue Lope de Vega, y cuántos lo han leído?

Entiendo lo que me basta
y solamente no entiendo
cómo se sufre a sí mismo
un ignorante soberbio.
De cuantas cosas me cansa
n
fácilmente me defiendo;
pero no puedo guardarme
de los peligros d
el necio.

viernes, 21 de noviembre de 2008

SACRÉ-COEUR

Paul Abadie debía de haberse llamado Paul Abadía (o Abbaye, en francés) para que su nombre coincidiera más y mejor con su oficio. Pues se hizo famoso restaurando iglesias y catedrales, hasta llegar, en 1870, a sustituir a Viollet-le-Duc como arquitecto diocesano de París, y a ganar, después, el concurso para la construcción de la basílica del Sagrado Corazón de Jesús.

La basílica, como todo el mundo sabe, está en lo alto de Montmartre. Y a mí, cuando subo por aquella espectacular escalinata, me produce unos cuantos sentimientos encontrados. Por un lado, no consigo olvidar los motivos de su existencia: rendir homenaje a la memoria de los franceses muertos en la guerra franco-prusiana, y expiar los pecados cometidos por la comuna. Por otro, me maravilla su blancura, que se debe a una piedra que, a más lluvia, se hace más blanca. Por otro, me desagradan un poco sus dimensiones agresivas, pedantes, y su estilo, que no es románico ni es bizantino, ni deja de serlo. Por otro, no soporto la fascinación que despierta en los turistas bulliciosos.

Si subo una y otra vez a Montmartre (que Paul Abadie me perdone) no es para recrearme viendo de cerca el Sacré-Coeur. Es para darme la vuelta, allá arriba, y ver a París desde lo alto. ¡París! París existe, y mientras exista yo seguiré creyendo que los humanos no somos simples animales de dos patas.

miércoles, 19 de noviembre de 2008

MARAVILLA MARAVILLOSA

Ayer se inauguró la obra maestra, impresionante, de un creador sin corbata y despeinado, nacido en Felanitx, y llamado Miguel Barceló: la cúpula de la Sala de los Derechos Humanos, del Palacio de las Naciones Unidas, en Ginebra. Fueron 35.000 kilos de pintura, dos años de trabajo de un equipo de quince personas, y bastante incomprensión, por no decir ignorancia.

"He aprendido a cuidarme de los políticos" -ha dicho el artista. Pero eso no ha impedido que los políticos hayan bautizado su obra como "la Capilla Sixtina del siglo XXI", devaluándola con la torpe comparación. Ni ha impedido que otros, mezquinos, no hayan visto que se trata de una inteligente aportación de España, encaminada a influir más en el mundo, recuperando hasta cierto punto el prestigio de la ONU... en Europa.

De todas formas, la obra está donde está, para los que quieran emocionarse con ella. Y la definición verdadera es la del propio Barceló: "Se trata del mar, y de las cuevas del mar, al revés, con nosotros por debajo".

martes, 18 de noviembre de 2008

ACOSO TELEFÓNICO

Quiero que mis lectores me perdonen si los decepciono cayendo en la tentación de escribir sobre cuestiones menudas y personales. Pues ya escribí aquí mismo, entre bromas y veras, en una entrada que titulé Guerra telefónica, sobre el acoso que algunos sufrimos por parte de las operadoras que insisten en vendernos unos servicios que no necesitamos o que no queremos. Y hoy, qué majadería, vuelvo a escribir sobre lo mismo.

Creía yo, ingenuamente, que había encontrado la manera de escaparme de las molestias que suponen las reiteradas llamadas de unas compañías telefónicas que, compitiendo ente ellas, pretenden que los abonados cambiemos la contratación. Y me equivoqué. Me equivoqué en redondo, porque el acoso ha vuelto con más virulencia que nunca.

Ahora, el teléfono que me saca de quicio es el 8669999611. Cuando bajo la guardia y atiendo sus llamadas, quien me acosa es una voz femenina, con fuerte acento argentino, que me suelta su discurso, de forma impertinente, sin atender al mío. Y cuando no atiendo, o simplemente cuelgo, la misma voz vuelve a llamarme enseguida por un "teléfono privado", anónimo.

La mortificación es tanta, que he intentado averiguar cómo se soluciona el problema, de verdad y para siempre. Pero no encuentro la respuesta. O, mejor dicho, he encontrado una respuesta que parece una broma de mal gusto: Telefónica, que es la compañía que me atiende, me dice que sí, que la cosa tiene arreglo, si contrato con ella un servicio de "bloqueo selectivo", por el que tendría que pagarle un tanto inicial y una mensualidad sin fin...

¿Han entendido? El abonado pierde siempre. Y Telefónica gana, hasta cuando compiten con ella, de frente o por detrás.

sábado, 15 de noviembre de 2008

BELLEZA DE OTOÑO

La belleza del otoño es delirante
porque precede al invierno, que
es cuando llega la verdad.

viernes, 14 de noviembre de 2008

ABUELOS

A ti, abuelo Antonio, no te conocí.
Pero sé, siempre supe, cómo eras.
Eras como eres en las fotos que guardo.
Eras severo, malhumorado y puntual.
Algunos dicen que me parezco a ti.
Tal vez por lo exigente y meticuloso.
Pero tú hablabas latín mejor que yo.
Y también cantabas mejor que yo.
Le cantabas a Dios y a todos los santos.
Mezclabas la música con la salvación.
Tu elegancia era una forma de respeto.
Tu muerte no fue porque fueras viejo.
Fue porque las vidas eran así, pequeñas.
Porque los días y los años eran enormes.
Porque todo cabía en un tiempo escaso.

A ti, abuela Maloles, te recuerdo mal.
Te recuerdo como una lejana pesadilla.
Te recuerdo de espaldas, vestida de negro.
O no tenías cara, o no querías verme.
O querías evitar que yo viese tu locura.
Tu cuarto era oscuro como el mar cercano.
Era un cuarto vacío, sin muebles, sin nada.
¿Dónde dormías, abuela, si no tenías cama?
Nunca pude aclarar aquel misterio mudo.
Y acabé creyendo que los locos no duermen.
Que hay que tenerles un miedo constante.
Sin dormir, la locura no consigue descansar.
Y si no descansa, siempre está al acecho.
Siempre puede hacer un daño inesperado.
A quien la padece, y a quien la vea de cerca.

A ti, abuelo Pedro, nunca nunca te olvidé.
Para mí, te sigues pareciendo a Gary Cooper.
Sigues aquí, a mi lado, contándome mentiras.
Me sigues queriendo como nadie más me quiso.
Y yo te quiero todavía, como te quise siempre.
De ti guardo mil recuerdos llenos de vida.
Llenos de ti, porque tú eras la vida misma.
Sabías de todo, sin haber ido a la escuela.
Siendo analfabeto, hablabas con perfección.
No teniendo mucho que contar, entretenías.
Nadie contó mejor que tú tu guerra de Cuba.
Me la contaste mil veces, y nunca era igual.
Pero un día triste, gris, nos separamos llorando.
Para ti, la felicidad eran el campo y la camella.
Para mí, ser feliz era emigrar, y emigré sin rumbo.

A ti, abuela Mandrea, ¿te iba yo a olvidar?
No eras cariñosa, pero sí mandona y eficaz.
Sin ti, la familia no hubiera soportado lo peor.
Soportamos las consecuencias de la guerra.
Mantuvimos con dignidad las apariencias.
El cómo, aquí, ahora, no es lo importante.
Lo que importa es que comimos más o menos.
Tuvimos cereales, papas, leche, queso, huevos.
Solamente nos faltaba aceite. Azúcar. Fósforos.
La ropa salía de los roperos del siglo olvidado.
Pero una vida tan estrecha llegaba a cansar.
Y a ti -quién lo diría- te cansó el sacrificio.
Llegó un día luminoso en que parecías otra.
En que parecías más fuerte y viva que nunca.
En que, decidida, cerraste tus ojos para siempre.

miércoles, 12 de noviembre de 2008

SEBRELI

Argentina: un país grande donde sobra inteligencia y falta cordura; donde los dioses son de barro inconsistente...

Para entender un poco más la fascinante contradicción, conviene leer Comediantes y mártires, el último libro de Juan José Sebreli, que vuelve a sorprendernos con su aguda forma de pensar y de escribir.

Se trata de una obra en la que analiza, "con datos objetivos, y no con interpretaciones", cómo cuatro personalidades argentinas del siglo XX han sido convertidas en mitos contemporáneos: Carlos Gardel, Evita Perón, Diego Maradona y Ernesto Che Guevara.

Después de analizar montañas de documentos, Sebreli llega a la conclusión de que el Che era un idiota político. "Puede haber sido, a la vez, un aventurero, un santo y un héroe; pero no un político".

Para Sebreli, una cosa es la persona y otra cosa es el mito construido a su alrededor. Por eso distingue al Gardel "artista excepcional" del Gardel "mito gardeliano". A Evita, que se consideraba a sí misma "abanderada de los humildes", Sebreli la recuerda por su obsesión con la alta costura. Y a Maradona sencillamente lo define como un personaje que se mueve entre el escándalo y el fraude.

A Juan José Sebreli, que ya desmitificó en El olvido de la razón a personajes como Nietzsche o Lévi-Strauss, no se le esconde el temporal que le espera cuando vuelva a Buenos Aires, después de presentar Comediantes y mártires en Madrid. Pero advierte: "Una sociedad democrática e igualitaria, en que los individuos son conscientes de su libertad, no ha de poner sus destinos en manos de los mitos".

martes, 11 de noviembre de 2008

CAYUCOS

El mundo anda revuelto porque una cuadrilla de especuladores que no ha ido a la cárcel hizo fortunas inmensas vendiendo hipotecas imposibles. Se reúnen los Gobiernos para intentar gobernar lo ingobernable. Se presta montañas de dinero público, suyo y mío, a los prestamistas privados...

Y, mientras tanto, los cayucos cargados de moribundos no paran de llegar a las costas canarias y andaluzas. Moribundos africanos que, huyendo de su propia realidad, se juegan la poca vida que les queda para encontrar, cuando no mueren por completo en la travesía, la más terrible de las decepciones.

¿Por qué? ¿Por qué huyen en cayucos, de esa forma tan cruel, si es mucho más barato, e infinitamente más cómodo, viajar en avión o en barcos decentes?

Viajan como viajan porque no son respetados ni tratados como seres humanos. Porque no tienen, como usted o como yo, derecho a tener un pasaporte o a comprar un simple billete común.


La desigualdad básica es tan brutal, que no sólo trastorna a los que se sienten "invadidos". También desquicia a los que "invaden". Cuando no son devueltos a sus lugares de origen (como esclavos que retornan castigados a la tierra irredenta) los africanos que se quedan deambulando por las calles y plazas de la Europa indiferente no tardan en encontrar, con más o menos suerte, las luces del Derecho. Descubren que existe la ley, el trabajo, la salud, la vivienda. Y empiezan a reclamar lo que humanamente merecen al país que los acoge o tolera. Pero nunca jamás se plantan en las escalinatas de sus consulados y embajadas...

Lo que quiero decir es que el mal no está en la llegada. Está, más bien, en la partida. De poco sirve presionar a los gobernantes democráticos europeos, si no se presiona a los corruptos mandatarios africanos. Un simple transeúnte europeo, o un enfermero caritativo, no puede hacer más por los que llegan que un embajador africano que aquí resida. O lo decimos claro, o el círculo vicioso no tendrá fin.

Piensen: ¿Ha visto alguien, alguna vez, a un diplomático africano socorriendo a un inmigrante compatriota suyo, vivo o muerto?

sábado, 8 de noviembre de 2008

CUANDO ME VAYA













Cuando me vaya se secarán las plantas.
El buzón se llenará de cartas sin abrir.
Mis papeles viejos serán papel mojado.
De poco servirán las fotos que guardé.

Nadie sabrá que en la casa vacía
se quedan las noches mal dormidas
y la esperanza de algún día feliz.

Cuando me vaya cambiarán las cerraduras.
Cambiarán los teléfonos y la cuenta del gas.
Serán otros los contratos del agua y de la luz.
Quitarán mi nombre de la puerta principal.

Nadie sabrá que en mi maleta cansada
no pude llevarme la vida vivida,
ni la fuerza para seguir viviendo.

Cuando me vaya pondrán otras cortinas.
Arrojarán a la basura los colchones usados.
Pintarán de otro color los techos y paredes.
Nada querrán saber del piso que pisé.

Nadie sabrá que esta vez no me voy
para volver algún día, alguna vez,
sino para dejarme morir en la distancia.

Cuando me vaya no tendré que decir adiós.
Los que tanto quise ya fueron queridos.
El país que no me quiso no sabe quién soy.
Ni en la calle ni el parque me echarán de menos.

Nadie sabrá que la nada no es nueva,
porque nunca hubo quien supiera
que lo que pudo haber sido no fue.

Cuando me vaya se secarán las plantas.
Cuando me vaya cambiarán las cerraduras.
Cuando me vaya pondrán otras cortinas.
Cuando me vaya no tendré que decir adiós.

viernes, 7 de noviembre de 2008

EXTRAVAGANCIAS

Hay extravagancias grandes, medianas y pequeñas.
La chica de arriba se llama Sarah Palin,
es gobernadora de Alaska, y ha querido
ser vicepresidenta de los Estados Unidos
mientras creía que África es un país y no
un continente...
La chica de abajo se llama Esther Sarrautte González,
es concejala de Patrimonio, Administración General,
Contratación y Atención al Ciudadano,
del ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife,
y no sabe lo que es una ONG.

jueves, 6 de noviembre de 2008

UN HUESO

Confirmado: el Jefe de Gabinete de la Casa Blanca será Rahm Emanuel, un duro durísimo, 48 años, amigo de Obama, congresista por Illinois, jefe de los demócratas en la Cámara de Representantes, fino y experimentado estratega, profundo conocedor de las cloacas de Washington, ex asesor de Bill Clinton.

Según el republicano John Feehery, Obama no ha elegido a Emanuel por ser su amigo, sino porque necesita "un poli malo", "un portero imbatible", para mantener en su sitio a los de su propio partido, y para decir quién entra, y quién no, en el despacho oval.

Fijándonos en la inquietante sonrisa del personaje, podemos suponer que Obama no se equivocó al decidir quién será su "mano derecha". Pero hay que saber, en todo caso, que Emanuel también tiene corazón. No deben ser casualidad sus estudios de ballet...

miércoles, 5 de noviembre de 2008

ANGELITOS NEGROS

¡Qué noche, la noche de ayer a hoy! Fue, salvadas las distancias, como aquella otra noche de la llegada a la Luna...

No pude estar, por poco, en la fiesta del Grant Park. Y al verme solo solito en plena madrugada, viendo la alegría del mundo nuevo por televisión, abrí una botella de champán y puse en el tocadiscos a Antonio Machín, cantando a toda voz la vieja canción:

Pintor nacido en mi tierra
con el pincel extranjero
pintor que sigues el rumbo
de tantos pintores viejos.

Aunque la Virgen sea blanca
píntame angelitos negros,
que también se van al cielo
todos los negritos buenos.

Pintor, si pintas con amor,
por qué desprecias su color,
si sabes que en el cielo
también los quiere Dios.

Pintor de santos de alcoba,
si tienes alma en el cuerpo,
por qué al pintar en tus cuadros
te olvidaste de los negros.

Siempre que pintas iglesias
pintas angelitos bellos,
pero nunca te acordaste
de pintar un ángel negro.

La letra de A. Eloy Blanco es tan mala como la música de M. Álvarez Maciste. Y por ello pido perdón a los vecinos que levanté de la cama. Pero de alguna manera -me lo pedía el cuerpo- yo tenía que celebrar este día de regocijo universal. Hoy, al fin y al cabo, es el Día de la Razón -el día en que los negros pueden soñar con casas blancas; en que los profesores de Derecho Constitucional consiguen derrotar a los matones de Vietnam.

martes, 4 de noviembre de 2008

UN GENIO

Nadie diría, ni por su nombre tan frecuente (José Luis Gómez García), ni por su figura menuda, ni por su sencillez, que este vecino mío es un genio. Hay que mirarle a la cara, a los ojos, prestar atención a su expresividad, escuchar su voz llena de finos matices, o verlo sobre un escenario, para darse cuenta de que es uno de los mayores actores españoles de todos los tiempos.

En el barrio lo ven pasar metido en su gastada ropa vaquera, o tomando café en el bar de la panadería, y pocos son (el teatro es cosa de minorías...) los que perciben la proximidad de un gigante. Pero yo, que tengo la suerte de tenerlo tan cerca, y de conocerlo bien, no puedo evitar una especie de emoción cada vez que lo veo salir en su todoterreno verde y embarrado. Pues me consta que sale a representar con perfección lo que no es. Hoy puede ir a darle vida a un personaje de Kafka. Mañana puede ir a darle vida a un personaje de Calderón de la Barca.

José Luis Gómez, actual director del Teatro de La Abadía, nació en Huelva. Pero se formó en el Instituto de Arte Dramático de Westfalia, en Bochum, y en la escuela de Jacques Lecoq, en París. Recibió los primeros aplausos en los principales teatros de Alemania. Fue invitado a festivales internacionales como los de Basilea, Berlín, Frankfurt, Praga, Zúrich...

En 1971, como consecuencia de su encuentro con Jerzy Grotowski en Wroclaw, regresó a España. Y aquí produce, dirige y actúa en montajes como Informe para una Academia, de Kafka, y Gaspar, de Handke, recorriendo con ellos los escenarios nacionales y latinoamericanos. Su interpretación en La resistible ascensión de Arturo Ui, de Brecht, y su laureado papel protagonista en la película Pascual Duarte, de Ricardo Franco, llegan a producir asombro.

En 1978, tras estudiar en Nueva York con Lee Strasberg, se hizo cargo de la dirección del Centro Dramático Nacional con Nuria Espert y Ramón Tamayo. Y en 1980, de la del Teatro Español. Para contar todo lo demás habría que escribir una enciclopedia.

Solamente en el Teatro de La Abadía ha trabajado como director de escena en La paz perpetua, El Rey se muere, Defensa de dama, Mesías, Baraja del rey don Pedro, Entremeses (de Cervantes), Castillos en el aire, y Retablo de la avaricia, la lujuria y la muerte. Como actor, en Play Strindberg, El señor Puntila y su criado Matti, y Las sillas. Como director y actor, en Informe para una Academia, Memoria de un olvido, y Azaña, una pasión española.

Pero antes ya había intervenido en unas veinte obras, desde El pupilo quiere ser tutor, de Peter Handke, hasta Carmen, de Bizet, y en unas veinte películas, desde Pascual Duarte, de Ricardo Franco, hasta Teresa, el cuerpo de Cristo, de Ray Loriga.

Y en cuanto a premios, nacionales y extranjeros, la lista también pasa de los veinte -también sirve para uno sentirse honrado con la vecindad de un genio.