viernes, 30 de octubre de 2009

COPACABANA PALACE

En el mundo hay treinta hoteles (nada más que treinta) que todas las personas deberíamos conocer antes de que la muerte nos lo impida. Y no sólo por lo que son y cómo son. También por la vida que hay acumulada -intangible pero intensa- en el ambiente irrepetible de sus salones, dormitorios, pasillos, restaurantes, puertas, balcones, lámparas, muebles, cortinas... Uno de esos hoteles es el Copacabana Palace, todavía en pie, rejuvenecido, en el número 1702 de la Avenida Atlântica, de Río de Janeiro. Para concebirlo, Joseph Gire, su arquitecto, se inspiró en el Negresco, de Nice, y en el Carlton, de Cannes. Y por eso los tres edifícios (y el Palace de Madrid, por razones que no vienen al caso) se parecen un poco, por fuera... El Copacabana se inauguró en 1923, y fue propiedad de la familia Guinle hasta 1989. Desde entonces pertenece a la multinacional Orient-Express Hotels, Trains & Cruises. En total han sido 86 años de historia, por la que han pasado todos los famosos, todos los ricos, y todos los poderosos de este mundo: Ramón Franco (...), Andre Pascal, Igor Stravinsky, Orson Welles, Nelson Rockefeller, Vincent Minelli, Alain Delon, François Mitterand, Robert de Niro, Mario Vargas Llosa, Zubin Mehta, etc.

Allí, en el Copacabana Palace, se rodó Flying Down to Rio, con Fred Astaire y Ginger Rogers bailando juntos, para siempre, de aquella manera.

Pero en el Copacabana también hubieron mil bailes más, que nadie rodó, o que fueron a parar a trágicos olvidos, o a recuerdos felices perdidos en el anonimato del tiempo y la distancia.

martes, 27 de octubre de 2009

HEITOR VILLA-LOBOS

Viajando de un continente a otro, de un país a otro, de un lugar a otro, he perdido (o me han robado) los discos que había seleccionado en Brasil para recordar a Villa-Lobos, en algún lugar de Europa, cuando se cumplen 50 años de su muerte... Heitor Villa-Lobos nació en Río de Janeiro el 5 de marzo de 1887 y murió en la misma ciudad, donde siempre tuvo su hogar, y donde está sepultado en el cementerio de São João Batista, el 17 de noviembre de 1959. Recibió una gran influencia musical de su padre, que era un lector incansable, bibliotecario, músico autodidacta. Fue compositor, clarinetista, guitarrista, violonchelista, pianista. Pero nunca se sometió a cualquier norma académica. Él mismo lo decía: "Mi música es natural, como una cascada", "Ponga un pie en la academia, y usted cambia para peor". Sin embargo, en 1923 aceptó una beca gubernamental para estudiar en París, donde permaneció hasta 1930, y donde fue amigo, entre otros, de Edgar Varese. Villa-Lobos componía con la misma facilidad de quien piensa o habla. Por eso dejó una obra gigantesca que todavía no se conoce en su totalidad. Y como componía poniendo la vida en cada nota, nadie niega la importancia y originalidad de su música, pero muchos siguen discutiendo si en ella hay más folclore o más vanguardismo... ¡El gran compositor del siglo XX no acaba de encontrar su pedestal, porque los puristas anteponen el detalle a la calidad y al sentimiento! En unos grandes almacenes del centro de París (donde estaré hasta mañana o pasado mañana) busco las Bachianas Brasileiras y me cuesta encontrarlas: aquí, los discos de Villa-Lobos no están donde están los de Johann Sebastian Bach, y sí donde se encuentran los de samba, carnaval, tangos, boleros...

viernes, 23 de octubre de 2009

ASTURIAS

He querido estar en Oviedo para ver y disfrutar de cerca el civilizado ambiente que rodea los Premios Príncipe de Asturias, que se entregan esta tarde. Pero no imaginaba que pudiese ser imposible encontrar alojamiento en la capital asturiana, y en gran parte del principado. Al final, después de mucha carretera, viene a parar a Taramundi, en lo alto de estas montañas bellísimas en que me encuentro, cerca de Galicia, donde hacía muchos años que no había estado, y donde sigue existiendo una excelente oferta de turismo rural. Y he vuelto a hospedarme en el Hotel La Rectoral, pionero y referencia de ese turismo de calidad... Se llama así, La Rectoral, porque se trata, sí, de una antigua casa rectoral primorosamente restaurada en 1986... ¡Un sueño "recto" y delicado, apacible, reconfortante, en lo alto del mundo! ¿Para qué preocuparme demasiado con las ceremonias de Oviedo? ¿Por qué arrepentirme de volver a comprobar que la felicidad también es posible en el silencio y en la lejanía?

miércoles, 21 de octubre de 2009

LA MUERTE

Yo sé que existe, que anda suelta por ahí, que no me pierde de vista, que algún día me sorprenderá. Pero no pienso en ella, ni para bien ni para mal. Y menos cuando, como ahora mismo, me encuentro viajando por el mundo en busca de más vida. Por suerte o por desgracia, las tristezas más tristes desaparecen de mi memoria con gran facilidad. Y tal vez por eso no llevo conmigo, a toda hora, el recuerdo de aquellas muertes que eran feas, oscuras, dolorosas e irreparables... Pero ayer, en el cálido y luminoso lugar donde leo, escribo y descanso, llamaron a mi puerta para decirme que una vecina había muerto. El cuerpo sin vida se encontraba expuesto en el Tanatorio de los Inocentes. Los usos y costumbres meridionales aconsejaban que también yo, simple forastero, fuese a verlo. Y para que no me perdiera en el camino me dejaron un folleto que nada tenía de fúnebre. Al contrario, con sus fotos a todo color, su aberrante tipografía y su mala literatura, paracía una pieza publicitaria del mismísimo Benidorm: "El Tanatorio de los Inocentes conforma un edificio de singular diseño cuyos nueve mil metros cuadrados son una perfecta combinación de luminosidad y grandes espacios. En él se encuentra disponible la más completa gama de servicios: atención al público durante todo el día, capilla, 17 salas (tres de ellas especiales), columbario, crematorio, zona de exposición de arcas y urnas, floristería, cafetería y aparcamiento exterior y subterráneo con capacidad para 170 vehículos. El Tanatorio de los Inocentes ofrece así un servicio detallista, personalizado y de gran calidad a todas aquellas personas que pasan por el difícil momento de despedir a un ser querido. La decoración de su interior procura un ambiente cálido y natural a cada rincón del edificio. En el exterior, más de mil metros cuadrados de entorno ajardinado confieren a este vanguardista tanatorio una imagen tranquila y apacible. Una acogedora capilla con capacidad para 600 personas. 440 columbarios para la custodia de urnas. Una moderna y amplia recepción con atención durante las 24 horas. Cada detalle es un símbolo de tranquilidad. Servicio de floristería, exposición de arcas y urnas. Todo un equipo profesional para asesorar y satisfacer cualquier necesidad en la atención de nuestros servicios. Disponemos de dos modernos hornos crematorios para los servicios de incineración. Acogedores espacios se mezclan con apacibles rincones que respiran calidez". De lejos, en vivo y en directo, el Tanatorio de los Inocentes me pareció un atrevido edificio dedicado a los deportes. De cerca, me pareció un formidable centro comercial. Por dentro, me pareció una fiesta campesina o playera: un gentío en mangas de camisa, zapatillas de paseo, pantalones vaqueros, celebrando la suerte de encontrarse así, de repente, de forma imprevista; exagerando a gritos, con satisfacción, las virtudes y sufrimientos de sus muertos, que eran, todos, por casualidad, Dios los proteja, las mejores personas del mundo... La muerte, ahora, en estos tiempos de crisis generalizada, dejó de ser una cosa seria...

sábado, 17 de octubre de 2009

BANDIDOS

Aprovechando el buen tiempo de este octubre que parece agosto, y sacándole partido a los precios y servicios que han mejorado con la crisis, recorro la Europa que quiero para no olvidarla, y para que ella no me olvide. Visito a viejos amigos alejados del mundanal ruído y de la mediocridad política. Me detengo en el desconcierto de las universidades, atrapadas entre el saber del pasado y la ignorancia del futuro. Vuelvo a pisar algunas redacciones de algunos medios de comunicación donde todavía me respetan... Y es ahí, en las redacciones, entre periodistas inseguros de sí mismos, donde me siento más incómodo. Pues en todas ellas, como si yo fuese un corresponsal deportivo, o como si a mí me interesaran los deportes, acaban haciéndome una misma pregunta: "¡¿Río de Janeiro?!" "¡¿Olimpiadas en la ciudad de las favelas y de la violencia?!"

Después de hacer lo posible para no caer en discusiones inútiles, caí en la cuenta de que en alguna de las redacciones que he visitado siguen pensando que ETA es un "movimiento independentista" y no una banda de asesinos. Y ese pequeño detalle me llevó a pensar, por algún extraño motivo, en algo que nunca había pasado por mi cabeza: la diferencia que hay entre un bandido de ETA y un bandido de los morros cariocas.

Conclusión: los bandidos vascos matan por un odio ciego que los empuja a mantenerse aislados, diferentes, puros, separados de toda contaminación política, económica, social o cultural; y los bandidos de las favelas llegan a matar por el deseo ferviente de integrarse -de ser iguales, en todo, a los que disfrutan el lujo y el progreso que contemplan desde sus chabolas...

domingo, 11 de octubre de 2009

TAM

La compañía TAM no es tan mala como dicen algunos, ni tan buena como asegura su ingenua publicidad, que, como um primitivo tantán, repite mensajes que no convencen. Lo de "The Magic Red Carpet", escrito en el morro de sus aviones, llega a ser ridículo, además de feo, por la simple falta de estética. Y las fotos, declaraciones y escritos del "comandante-presidente", en todas partes y en todo momento, como si se tratara de un dictador asiático, tienen algo de enfermizo... Lo mejor de la TAM son sus empleados: brasileños que no han perdido su forma de ser, que no han sido manipulados para ser de otra forma, y que por eso se comportan con la simpatía, la corrección, el respeto y la delicadeza que les son innatos, y que tanto escasean en el mundo de la aviación que actualmente sufrimos... Lo peor de la TAM es su imagen corporativa, que parece inspirada por la mente de algún nuevo rico, empeñado en exagerar el mal gusto e incapaz de sacarle partido a las virtudes y a los detalles más valiosos. El uniforme negro-marrón de sus empleados es imperdonable en un país donde todo es verde-amarillo-azul-blanco. Las azafatas vestidas de camareras prusianas, con aquellos delantales oscuros hasta el suelo, pierden toda la gracia que las caracteriza como personas y adquieren un aire fúnebre sin lógica ni sentido... Para ser de verdad lo que ella misma cree que es, la TAM sólo tendría que hacer dos cosas: moderar los impulsos egocéntricos de su "comandante-presidente" y aliviar la pesadumbre de su imagen corporativa.

viernes, 2 de octubre de 2009

TAHÍCHE

Tahíche, con esa hache y ese acento en el medio, era una aldea desolada, rodeada de restos volcánicos, castigada por el viento, que quedaba al margen de carreteras que iban para otros lugares. Sus vecinos varones se dedicaban sobre todo a la pesca. Y la pesca los alejaba durante meses de sus familias. Las mujeres se quedaban solas, despeinadas, vestidas de negro, cuidando de los hijos sin futuro y de las casas pobres, que se les caían encima de tan pobres. Pero en Tahíche, pese a la adversidad, había una escuela primaria instalada en el peor de todos los inmuebles: una escuela que era femenina por las tardes y masculina por las mañanas. La maestra, desatenta y desagradable, sobre todo conmigo, vivía allí mismo, escondida en un cuarto de piedra seca con un ventanuco miserable. El maestro era yo, con sólo 17 añitos de edad, porque la brutal depuración política del Magisterio había apartado a los profesores de carrera, y, también, porque mi familia y mis vecinos más ilustres habían tenido la ocurrencia, en aquellos tiempos y en aquella isla, de enseñarme gramática, matemática, ética, estética, latín, canto gregoriano, dibujo y otras cosas "inútiles". Y un buen día recibí un oficio de la Delegación Insular del Frente de Juventudes (F.E.T. y de las J.O.N.S.) que decía: "Delegación Insular - ARRECIFE - A efectos de cumplimentar circular de nuestro Excmo. Sr. Gobernador Civil-Jefe Provincial del Movimiento, ruego a Vd. comunique a la mayor brevedad que le sea posible relación nominal y edades y domicilios de la matrícula de alumnos de su escuela. - POR DIOS, ESPAÑA Y SU REVOLUCIÓN NACIONAL-SINDICALISTA - Arrecife, 31 de Enero de 1.953 - EL DELEGADO INSULAR - Sello oficial y firma ilegible". Y yo, claro está, no tardé en mandar la lista, escrita a mano, con aquella letra mía de adolescente soñador:
- Plácido Betancort González, 12 años.
- Agustín Pérez y Pérez, 10 años.
- Domingo Valdivia Robayna, 12 años.
- Maximino Duque Pérez, 12 años.
- Domingo Duque Pérez, 7 años.
- Félix Martín García, 10 años.
- Jeremías Martín García, 7 años.
- Juan Cáceres Delgado, 8 años.
- Matías Betancort González, 8 años.
- José Pérez Valdivia, 7 años.
- Angelito Delgado Pérez, 7 años.
- Manuel Pérez Rodríguez, 8 años.
- Rafael Padrón Barreto, 8 años.
- José Padrón Barreto, 6 años.
- José Pérez Caraballo, 6 años.
- Blas Martín Abreut, 10 años.
- Antonio Rodríguez Domínguez, 12 años.
- Juan Rodríguez Domínguez, 12 años.
- Antonio Martín Betancort, 10 años.
- Domingo Fontes Betancort, 10 años.
- Luciano Fontes Betancort, 7 años.
- José Pérez Robayna, 9 años.
- Agustín Pérez Robayna, 12 años.
- Andrés Hernández González, 10 años.
- Manuel Hernández González, 7 años.
- Agustín Valdivia Robayna, 10 años.
- Domingo Callero Robayna, 12 años.
- Manuel Duque Betancort, 8 años.
- Vicente León Cabrera, 9 años.
- Santiago Sánchez Abreut, 9 años.
- Luciano Pérez Caraballo, 10 años.
- Rafael Duque Betancort, 10 años.
- Tobías Domínguez Fontes, 8 años.
- Manuel Delgado León, 8 años.
- Francisco Fontes Pérez, 11 años.
Pasó una eternidad, pasaron la vida y la muerte de César Manrique, las cosas mejoraron en Tahíche, que ahora hasta tiene una cárcel famosa donde detienen a los políticos, y hoy, entre mis papeles viejos, en una universidad del otro lado del mundo, vuelvo a encontrar aquel oficio y aquella lista de mis primeros y queridos alumnos. Qué habrá sido de ellos? Se acordarán de mí?